De los 24 millones de quilates que anualmente extrae la producción mundial, ocupamos el segundo lugar después de Kimberly al Sur África, quién encabeza la mayor extracción de diamantes; pero sin embargo, este diamante africano, no supera en dureza, brillo e impurezas, al diamante de nuestra Gran Sabana… No obstante que del continente africano provienen la mayoría de las gemas, estos son diamantes conseguidos en estratos profundos en etapa inicial de formación, que no superan la dureza y brillo del diamante venezolano.

Los nuestros se encuentran prácticamente a flor de tierra, a lo largo del río Icambaro, como resultado de las terribles presiones que sufrió la piedra de carbón, y que la tierra expulsa a los lechos de los ríos, donde luego son pulidos por la madre naturaleza… Sólo cuatro diamantes encabezan en quilates, pureza, brillo y perfección todas las piedras conocidas: el “Hope” a quién se le vincula con trágicos desenlaces; el llamado “Portugués” con 127 quilates y otros dos que fueron encontrados en suelo venezolano, conocidos como Barrabas y El Libertador. Mientras que para la casa De Beers en Africa Sudoccidental, quién por cierto ha logrado extraer un sólo diamante de más de 100 quilates (el Cullinan), y ha creado un imperio multimillonario en piedras que genera miles de millones de dólares para la economía inglesa, en Venezuela, la explotación del diamante fue marginal y no representaba ningún aporte para el Presupuesto del Estado..! Miles de contrabandistas deforestan miles de hectáreas para robar de nuestro suelo, esas preciosas piedras que pudieron representar un aporte importante para la economía venezolana… Sin embargo, los diamantes venezolanos llegaban de contrabando a los mercados internacionales controlados desde Londres, donde se monopoliza la producción de diamantes para mantener los precios… La mayoría de nuestros diamantes eran llevados a la ciudad de Amberes en Bélgica, como el mayor “mercado negro” de diamantes venezolanos, mercado que es controlado por los judíos mediante la “Bolsa de Diamantes”